Discriminación
por género: Entrevistas y Testimonios
Muchas mujeres son víctimas
de diferentes formas de maltrato en diversos contextos. Estas prácticas se
acentúan en una sociedad machista como la nuestra, por ello decidimos abordar
la problemática acudiendo a la fuente primaria: mujeres de diversas edades y
contextos que han sido víctimas de abuso y ahora comparten sus historias con
nosotros, permitiéndonos entender mejor el tema.
1)
Descripción
de las entrevistas realizadas (número y características)
Para abordar
el tema de discriminación por género, se realizaron cuatro entrevistas a
diferentes mujeres que habían sido víctimas de abuso y maltrato. A partir de
sus experiencias personales se buscó comprender con mayor profundidad el tema.
Primero, se entrevistó a Elvira, una madre
divorciada con dos hijos. En su caso, fueron sus hijos la motivación para
separarse de un esposo abusivo y golpeador que la maltrataba tanto física como
psicológicamente. Ella es un ejemplo de aquellos casos en los que felizmente la
esposa logra salir del contexto disfuncional para no comprometer el psiquismo e
integridad de los hijos.
Luego, Sofía de Trujillo brindó su testimonio de cómo ella toleró que su esposo
le sacara la vuelta y la maltratara por miedo de que él pudiera quitarle a su hija
si ella hacía algo al respecto. Finalmente, ante la amenaza de que su ex marido
ataque a su hija, ella decidió abrirse con su familia, quienes la apoyaron
económicamente para que ella pueda venir a Lima, denunciar el abuso y escapar
de aquella situación.
Asimismo,
María es una mujer que sufrió
abuso físico por parte de su enamorado alcohólico. Al permitir agresiones
verbales, el nivel de agresividad de su pareja fue aumentando, hasta causarle
daños severos. No obstante, el proceso de dejarlo se le hizo difícil al haber
desarrollado un sentido de co-dependencia.
Finalmente, María Victoria aceptó
entablar una relación con una pareja que le costeaba los estudios. Su
enamoramiento fue fugaz y rápidamente se mudaron juntos. Al encontrarse ella
dependiente de éste hombre, sintió la obligación de complacer sus deseos y
someterse a actos en los que se sentía incómoda, siendo víctima de abuso
sexual, físico y psicológico.
Además de las entrevistas, hemos añadido el
caso de Gloria, una niña interna en el hogar Ermelinda Carrera del
Inabif, que ha sido víctima de repetidos abusos y maltratos.
2)
Evaluación
de la experiencia de realización de entrevistas en primera persona, ¿cómo se
sintieron?
Realizar las entrevistas y abordar un tema
tan delicado como el maltrato de género, fue una experiencia bastante fuerte.
Los diferentes casos revelan historias muy delicadas, que en ocasiones
generaron un poco de incomodidad o tristeza en los entrevistadores. Es
imposible no sentir el dolor de dichas mujeres que cuentan una parte muy
dolorosa de sus pasados y que sin mayor reparo comparten sus experiencias.
En el caso de María por ejemplo, fue un
incentivo para la entrevistadora que ella quiera compartir su historia para evitar
que más mujeres repitan sus casos. Además, de ser una manera reparadora de
recordar su historia.
En el caso de Gloria, fue doloroso ver cómo
en nuestra sociedad se pueden cometer actos tan crueles contra una niña, debido
a concepciones machistas que la colocan como objeto sexual de uso común.
Consideramos que la
entrevista en el caso de Gloria fue especialmente difícil, debido a que ella es
una persona sumamente tímida y desconfiada. Tiende a dar respuestas cortas y
vagas, por ello constaba un poco más de trabajo obtener la información
necesaria. Al inicio le constó abrirse con el tema de la violación, pero se
estableció un buen rapport y al final pudo contarlo y comentó también otros
temas bastante personales. Es una chica dulce e inspiró mucha ternura; permitió
ver en ella a la niña que necesitaba ser protegida y que ha sido una víctima de
un contexto familiar inadecuado que carece de límites.
Si bien ella afirma
sentirse más tranquila en comparación con el primer año en el hogar, donde dice
haber estado “traumatizada”, al parecer aún necesita apoyo emocional para que
pueda abrirse y trabajar temas como las múltiples violaciones, el abandono de
su madre y que esto le posibilite mejorar su confianza. Del mismo modo, sigue
mostrando miedo de que su padre pueda todavía hacerle daño, que es un tema que
ella también necesitaría trabajar.
Debemos resaltar el
hecho de que a pesar de todo, muestra ser una chica fuerte que no pierde la
ilusión de lo que le viene a futuro y se muestra entusiasta al hablar de que
quiere seguir llevando talleres de cosmetología para trabajar en una peluquería
y salir adelante. Tiene como fortalezas su fe religiosa y el vínculo que tiene
con su tía, quien la visita casi semanalmente. Consideramos que aunque haya
tenido una historia difícil, será capaz de restablecerse y lograr una vida sana
a futuro si cuenta con el apoyo de su tía y un contexto favorable.
Su historia, así como
las demás, sirven de ejemplo para la sociedad de cómo muchas mujeres que son víctimas
de abusos pueden ser capaces de decir BASTA y sobreponerse a ellos, mostrándose
fuertes y con grandes capacidades de resiliencia.
3)
¿Cómo
se modifica nuestro conocimiento de la problemática sociocultural luego de la
experiencia de la entrevista?
La
violencia y la discriminación de género eran temas que antes de realizar
este trabajo conocíamos superficialmente.
Teníamos conocimiento de que se llevaban a cabo muchos tipos de violencia en
nuestra sociedad pero no teníamos noción de cuán arraigadas estaban estas costumbres en nuestra
cultura. Hemos modificado muchas cosas de nuestro conocimiento como ciudadanos
acerca de esta problemática en nuestro país. Lo que nos llamó mucho la atención
fue la comodidad con la que muchas mujeres aceptaban la violencia de los
hombres como si se lo merecieran de alguna manera. La comodidad con la que se
podían adaptar un tiempo a estos hábitos por pare de los hombres nos impactó
mucho. En la mayoría de casos, estas aguantaron hasta las últimas consecuencias
en que una tercera persona las “salvaba” y las sacaba de ese estilo de vida que
habían adoptado. La modificación más importante que podemos rescatar es el hecho que antes de nuestra
investigación, nosotros veíamos a la mujer como víctima total de estas
agresiones por parte del sexo opuesto, pero nos hemos encontrada con la
sorpresa que muchas mujeres permiten este tipo de abusos y se acomodan a los
hábitos que las denigran como personas y mujeres. En la sociedad se acepta este
tipo de conductas y muchas mujeres creen que por que los hombres les dan
ciertas comodidades o les pagan algunas cosas de la vida cotidiana tiene
derecho sobre ellas. Hemos modificado nuestro conocimiento ya que ahora
conocemos porque las mujeres permiten eso y porque son más frecuentes estos abusos.
4)
¿Qué
nuevos elementos de la problemática
hemos descubierto y no habíamos tomado en cuenta anteriormente?
Hemos
descubierto por medio de las entrevistas que:
Muchas veces nos hemos preguntan: ¿Por qué la mujer maltratada
física, psicológica y sexualmente tolera esa situación durante años?
Hay varias razones. La persona abusada se
vuelve co-dependiente de su marido (el agresor), aún después de ser golpeada. Muchas veces hemos escuchado esta frase:
"Es que yo lo quiero tanto". Personas que llevan años soportando
golpes dicen: "Yo no me separo porque lo quiero". Es imposible querer
a una persona que te está tratando como si fueras una nada alguien si
sentimiento y sin valor personal; o es que estás muy mal de la mente. Eso no es
querer, eso es depender de esa persona.
Otro motivo por el cual algunas mujeres no se separan de este problema de codependencia completa, es que las anima la familia y lamentablemente la Iglesia, a permanecer con el abusador. Sobre todo la familia les aconseja que mantengan esa relación por "el bien de los hijos".
Otro motivo por el cual algunas mujeres no se separan de este problema de codependencia completa, es que las anima la familia y lamentablemente la Iglesia, a permanecer con el abusador. Sobre todo la familia les aconseja que mantengan esa relación por "el bien de los hijos".
Esto nos hace pensar y preguntarnos ¿Qué es mejor, tener un padre que golpea a su madre y que luego golpeará a sus hijos, o no tener padre? Nosotros creemos que se les hace mucho más daño a los hijos cuando ven que su padre golpea a su madre. Para los niños pequeños la madre es la base de toda su vida, la base de su afectividad, la base de su seguridad. Si una madre es golpeada, sus hijos se derrumban afectivamente. Es mucho mejor separase.
A veces las mujeres no se separan y sufren en silencio por miedo a perder su seguridad económica y la de sus hijos. Esto sucede sobre todo en la mujer que no tiene educación. Otras veces no se separan debido a las amenazas de más violencia o de muerte, si intentan separarse.
También le impiden a la mujer a veces darse cuenta de que está siendo maltratada, sus creencias religiosas. Que quede bien entendido esto: hay que luchar por mantener el matrimonio, pero en una situación de estas no es deber de una mujer mantenerse casada a toda costa.
Cuando se pregunta a algunas mujeres por qué aguantaron maltrato durante años, la respuesta más común es ésta: "Por mis hijos; no quería que se criaran sin un padre". Parece una respuesta válida, pero si la analizamos profundamente descubrimos su inconsistencia. Sucede que en una situación de violencia los hijos también salen perdiendo. El crecimiento en una atmósfera de miedo, tensión y terror influirá negativamente en su desarrollo emocional y más tarde se manifestará en el abandono escolar, en el uso de drogas, en desórdenes psicológicos y en violencia y delincuencia.
Muchas veces las personas se preguntan si ¿Es
justo mantener a los hijos en ese ambiente infernal? Aunque sea triste que unos
hijos se queden sin padre, peor es que crezcan viendo cómo su padre maltrata a
su madre.
En muchos casos influye el factor económico. Soportan cuanta vejación venga con tal de no perder la seguridad económica para sí y sus hijos. Se trata generalmente de mujeres con poca preparación académica, conscientes de que sin el marido no podrían vivir cómodamente.
Lo peor es que la mujer repetidamente abusada se destruye psicológicamente. Su yo, su identidad individual, se erosiona. Eso la incapacita para tomar las decisiones correctas. Cae en la ambivalencia efectiva su autoestima queda por los suelos hasta creer ella misma que merece tales insultos y golpes.
Cuando una persona cae a ese nivel, su capacidad de decisión queda prácticamente anulada, porque el principio vital está herido de muerte. Si a una persona así aplastada se le amenaza con un "Si me denuncias, te mato", se sentirá paralizada. Quizás en un último intento de supervivencia reaccione, pero usando las mismas armas que a ella la han destruido.
No dejemos que las aguas se conviertan en torrentes destructores. Ayuden a las víctimas de la violencia y anímenlas a romper esa dependencia nociva
En muchos casos influye el factor económico. Soportan cuanta vejación venga con tal de no perder la seguridad económica para sí y sus hijos. Se trata generalmente de mujeres con poca preparación académica, conscientes de que sin el marido no podrían vivir cómodamente.
Lo peor es que la mujer repetidamente abusada se destruye psicológicamente. Su yo, su identidad individual, se erosiona. Eso la incapacita para tomar las decisiones correctas. Cae en la ambivalencia efectiva su autoestima queda por los suelos hasta creer ella misma que merece tales insultos y golpes.
Cuando una persona cae a ese nivel, su capacidad de decisión queda prácticamente anulada, porque el principio vital está herido de muerte. Si a una persona así aplastada se le amenaza con un "Si me denuncias, te mato", se sentirá paralizada. Quizás en un último intento de supervivencia reaccione, pero usando las mismas armas que a ella la han destruido.
No dejemos que las aguas se conviertan en torrentes destructores. Ayuden a las víctimas de la violencia y anímenlas a romper esa dependencia nociva
5)
¿Qué
tipo de personalidades de los protagonistas emergen a partir de las
entrevistas?
Las protagonistas de nuestras entrevistas son mujeres
violentadas por personas de su entorno familiar: esposo o progenitor. El perfil
de una mujer que ha sufrido de abuso físico, sexual o psicológico se refleja y
evidencia en cada parte de la narración de su historia. La víctima se acepta
culturalmente una cadena violenta en la que el padre golpea a su pareja, la
madre a los hijos y los hijos entre ellos, respondiendo a patrones negativos
que se transmiten a veces de forma simbólica por medio de actitudes de rechazo,
de indiferencia y otros pequeños actos cotidianos.
De acuerdo a la modalidad de que se trate, a la edad de
la víctima, a su relación con el autor y a la duración de la agresión, las
consecuencias a nivel físico, psicológico o social pueden ser graves,
gravísimas o irreversibles, llegando incluso hasta la pérdida de la vida.
Algunos rasgos marcados en las entrevistadas son: baja autoestima, indiferencia
afectiva, aislamiento social, adjudicarse la culpa de las agresiones, bajo
rendimiento intelectual.
La violencia produce una fractura en la vida de la
víctima, tanto a nivel psíquico como familiar y social, después del delito, su
vida no volverá a ser la misma, es por ello que se plantea que las víctimas de
violencia familiar son sobrevivientes. Las mujeres son sensibles a las
agresiones y la mayoría de las veces son ellas las agredidas, pues el sexo
opuesto las somete a su voluntad.
Ante la agresión la mujer es capaz de emitir respuestas
agresivas y se encuentran en una actitud defensiva constante, porque percibe el
medio externo muy hostil y peligroso. Sus agresiones generalmente son abiertas
y de tipo verbal, aunque tampoco son menos frecuentes las agresiones físicas,
pues siempre se siente en peligro y pierde el control.
Por lo mismo, la problemática de la mujer maltratada
sigue siendo uno de las manifestaciones de violencia social más grave en la
actualidad. Los diferentes abordajes sociales que se han implementado parecen
no arrojar el resultado deseado, ya que las conductas agresivas en el ámbito
doméstico o familiar siguen siendo de alto grado. Es indispensable insistir en
algunos puntos claves para que la sociedad los retenga y sostenga como una
herramienta más para enfrentar la situación, y que formen parte de un
aprendizaje social sobre la temática. Cambiar patrones de conducta y
comunicacionales en la familia actual. Sólo si cambiamos la perspectiva desde
donde mirar este problema social podremos encontrar alternativas distintas para
llegar a una solución más acertada.
6)
¿Qué
me dice este trabajo sobre la alteridad (relación con el otro)?
Dado los casos de las entrevistas, la
recolección de noticias y la especificación a la que nos hemos dirigido, si
existe una relación con el otro, solo que esta relación está alterada y en un
desbalance total. Estamos hablando de una relación de amo y sirviente, en la
cual el hombre cumple el rol de amo y la mujer aborda lo que corresponde a
sirviente. Es una relación en la cual la mujer no tiene índice de opinión o
puede hacerse valer como igual ante una situación equis, mientras que el hombre
tiene la potestad de poder tomar decisiones en cualquiera de los casos que
pudieran presentarse.
7)
¿Qué
me dice este trabajo sobre la cultura?
Gracias a este trabajo podemos notar que en
la cultura peruana existe un gran nivel de limitaciones para la mujer, lo que
se puede entender como machismo; hablamos de las actitudes prepotentes de ellos
hacia las mujeres. En las entrevistas realizadas podemos observar cómo es que,
el hombre que suele abusar de la mujer, consideran que ellos tienen la última
palabra porque son quienes “mantienen” económicamente el hogar, lo que les da
derecho a actuar en cualquier situación u opinar sobre lo que les plazca. Podemos
observar una relación con la lectura del macho salvaje, en la que ellos
mantenían una organización en la cual las mujeres solo se dedicaban a la casa y
al cuidado de los niños, mientras ellos eran los encargados de traer la comida
o hacer las cosas que demandaban habilidades físicas. La cultura peruana anda más
o menos por ese camino también, ya que muchos hombres piensan que mujer no
puede ser independiente por sí misma, que no tiene las mismas habilidades que
puede tener un hombre o el mismo poder de decisión e impacto en la sociedad;
todo esto sale de las discapacidades físicas de la mujer, por lo que ellas no
tienen la fuerza que tiene el hombre, siempre se piensa que no pueden
desempeñarse como éstos.
En conclusión, en la sociedad peruana, aparte
de poder observar este machismo que se encuentra marcado en muchos lugares y
personas, tenemos el problema de la falta de educación que reciben muchas
personas, lo cual no nos permite poder alterar o cambiar este pensamiento
arcaico que tenemos sobre la desigualdad de género. Por lo que el machismo se va
a mantener presente en nuestra cultura hasta que la educación mejore.
ENTREVISTAS:
Por
temas de confidencialidad se cuidará la identidad de las entrevistadas, de
quienes hemos modificado los datos personales.
Entrevista 1:
Nombre (Supuesto): Elvira
Edad: 32
Ocupación: Recepcionista.
Hijos: 2
Fecha: 15-11-2012
Hora de inicio: 1:00 PM
Hora de fin: 1:30 PM
Entrevistadora: Hola mi nombre es Karla, soy estudiante de psicología y me gustaría
saber si me podrías brindar una entrevista.
Elvira: Claro.
Entrevistadora: ¿Qué me podrías contar sobre ti?
Elvira: Tengo 32 años, trabajo en una
empresa de Call Center y mi función es de recepcionista, tengo dos hijos.
Entrevistadora: ¿Cuál es su estado sentimental
actual?
Elvira: Actualmente me estoy divorciando.
Entrevistadora: ¿Me podrías contar como es la relación
que mantienes actualmente con el papá de tus hijos?
Elvira: La relación que mantengo no es muy buena, ya que nuestra separación fue
por un motivo de violencia física y psicológica.
Entrevistadora: ¿Me podrías contar como
conociste a tu pareja?
Elvira: En la casa de una amiga lo conocí, ella hizo una reunión por su
cumpleaños nos presentaron amigos en
común. Durante toda la fiesta estuvimos bailando y conversando, al final de la reunión se me acerco y me dijo para
volver a vernos otro día. Eso quedo en
nada luego nos volvimos a encontrar en
otra reunión un tiempo después y ahí empezamos a salir.
Entrevistadora: ¿Cuánto tiempo estuvieron antes de casarse?
Elvira: Al año me propuso matrimonio y
fue todo una sorpresa para mí y en ese momento yo era muy joven tenía 21 años y
él ya había terminado su carrera y trabajaba y como lo quería bastante y estaba
ilusionada, acepté.
Entrevistadora: ¿Me podrías contar cómo fueron tus primeros años de matrimonio?
Elvira: Bueno, los primeros meses fueron meses relativamente buenos habían
discusiones pero yo pensaba que era normal en toda pareja pero no me daba
cuenta que a medida que pasaba el tiempo las peleas se estaban intensificando y
la agresividad también. Recuerdo que un tiempo después más o menos un año,
comenzó a volverse más agresivo por cosas tontas… me acuerdo mucho que un día
el llegó de trabajar y me reclamó que la
comida estaba fría, comenzó a decir que él se la pasaba trabajando y lo mínimo
que yo debía hacer era atenderlo y complacerlo porque el mantenía la casa y
todos mis gustos. Recuerdo que ese día tiro todos los platos y eso se me quedó
grabado. Ahí empezó la época más dolorosa de mi vida pero mis hijos son lo más
valioso de esta historia.
Entrevistadora: ¿Pensaron de inmediato en tener hijos?
Elvira: No, yo tenía 21 años era
joven en cambio él sí quería, por eso en
menos de un año quede embarazada.
Entrevistadora: ¿Cómo fue la relación de pareja durante el proceso de embarazo?
Elvira: En los primeros meses la relación fue estable él estaba contento y
animado pero cuando veía alguna cosa que no le gustaba gritaba y se volvía
violento. Se irritaba fácilmente y se ponía agresivo. Como yo no podía por mi
estado atenderlo o hacer las cosas del hogar se ponía furioso y comenzó a
golpearme físicamente… al comienzo solo me cogía fuerte o me sacudía. Después
se puso peor…
Entrevistadora: ¿Con que frecuencia te golpeaba?
Elvira: Me pegaba cada vez con mayor frecuencia y siempre después me pedía
disculpas y me decía que lo hacía porque no se podía controlar, por el estrés
del trabajo y que lo comprenda y que lo perdone. Yo le perdonaba porque era el
papá de mi hijo. Aparte recién habíamos empezado y yo sentía que tenía que
entregar más en la relación por mi hijito.
Entrevistadora: ¿Le comentaste a alguien cercano a ti el problema que estabas pasando?
Elvira: No, me daba vergüenza el aceptar que mi matrimonio estaba fracasando no
quería que mi mamá de alguna manera me diga que me separe de él y yo
inconscientemente a pesar que sabía que había maltrato físico de por medio yo
no quería separarme de él porque había formado mi familia y quería conservarla.
Entrevistadora: ¿Me podrías contar si en algún momento pensaste en separarte?
Elvira: Si en algún momento pensé en separarme cuando mi hijo estaba chiquito…
tenía todo pensado ya no estaba dispuesta a aguantar un maltrato físico más,
pero justo en ese transcurso me di cuenta que estaba embarazada de mi segundo
hijo entonces me vinieron sentimientos de culpa y decidí seguir con el
matrimonio.
Entrevistadora: ¿Hubo algún cambio en tu esposo cuando se enteró que estabas esperando
a tu bebe?
Elvira: Él me prometió que iba a cambiar, lo hizo durante todo el embarazo,
pero después volvió lo mismo las discusiones peleas y simplemente.
Elvira: En el momento en que empezó a golpearme en frente de mis hijos,
entonces yo dije que esto ya no podía seguir porque mis hijos estaban creciendo
con temores y yo veía que ellos lloraban y no se sentían cómodos con su papá.
Decidí armarme de valor y contarle a mi mamá entonces recibí el apoyo de mis
padres. Ellos me ayudaron en inicio con la parte económica hasta que yo
consiguiera un trabajo. Creo que mi
mayor miedo y motivación eran mis hijos, me daba miedo que él pudiera hacerles
daño a ellos en algún momento…
Entrevistadora: ¿Nunca llegó a golpearlos?
Elvira: No, felizmente. Pero sí creo que el hecho de haber vivido eso igual les
afectó de alguna forma... yo salí rápido felizmente para evitar un daño mayor.
Entrevista 2:
Nombre: Sofía
Lugar de nacimiento:
Trujillo
Nivel
socio-económico: B
Buenas tardes
-hola
¿Cómo se encuentra?
-Bien, gracias por
preguntar
¿Cuánto tiempo estuvo
casada?
-25 años
¿Y, me puede contar
como fue que conoció a su ex esposo?
-Bueno, allá en
Trujillo las cosas son diferentes a aquí, yo tenía 18 años y pensaba estudiar
medicina en una universidad de allá, pero mis padres querían que viniera a Lima
por lo que es la capital y existen mayores oportunidades, pero no quise y
postulé a la universidad allá y comencé mis estudios en contra de mis padres.
La cosa es que en una fiesta de bienvenida para los nuevos ingresantes lo
conocí pues. El no había ingresado, pertenecía a otra carrera pero estaba ahí.
Al final terminamos conversando y bueno, como era mayor que yo, me pintaba unas
cosas increíbles, como que ganaba mucha plata, que vivía solo, que era
independiente y me contó toda su vida en pocas palabras, terminé saliendo de
ahí enamorada de una mentira.
¿Cuánto tiempo
estuvieron?
-Después de la
fiesta, me estuvo buscando, y fuimos pareja unos 5-6 meses hasta que me propuso
matrimonio y como en verdad yo quería salirme de mi casa por las peleas que
tenía con mis padres por lo de no venir a estudiar en lima, acepté.
¿Cómo fueron los primos
meses de matrimonio?
-Fueron terribles,
habían demasiadas peleas, al final resultaba que él me mintió sobre casi todo:
no vivía solo, sino con sus hermanas, tiene 2, y que era un vago, que no
trabajaba, conseguía la plata por otros medios. La cosa es que aun así decidí
apostar por él, le di la oportunidad y le perdoné las mentiras, al fin y al
cabo estaba enamorada de él. Y aparte, estaba embarazada de Cristina, no podía
romper la familia por esas cosas, pero si me regrese a casa de mis papas por lo
molesta y resentida que estaba. Él me buscaba y me lloraba para regresar hasta
que lo perdoné. Ahí fue que recién nos casamos.
¿Luego de esos meses,
como fue que comenzaron las cosas?
-Eso comenzó hace
mucho antes que me pasara a mí, un día regresé a casa temprano de recoger a Cristina
de la casa de mi mamá porque ella tenía cosas que hacer y en lo que regresé a
casa, me di cuenta que todo estaba silencioso y por lo normal a esa hora estaba
la hermana de mi ex esposo cocinando, pero no había nadie en la cocina, así que
subí para bañar a Cristina y me encontré con él y otra mujer en la ducha, fue
terrible no sabía qué hacer, estaba en demasiado shock, estaba llorando, no
podía creer lo que estaba viendo. Fui corriendo a dejar a Cristina en su cuna y
regrese al baño a agarrarlos a escobazos a los 2, me dio asco. Mi ex esposo al
vernos lo primero que hizo fue quitarme la escoba y me tiró al piso y ella se
quedaba mirando; y ahí me amenazó, me dijo que si decía algo o hacia algo me las
iba a ver con él, que se iba a llevar Cristina. Que no le importaba nada que
pobre que digamos algo, no sabía qué hacer, estaba demasiado en shock. Nunca
olvidare como comenzó la pesadilla, y tuve que hacerle caso, lo único que
quería es que mi hija estuviera a salvo…
¿Y cómo fue que
siguió con eso? ¿Como hizo?
Las cosas no fueron
fáciles, encima empeoraron, el animal ese ya no se escondía, ahora tenía el
descaro de hacerlo a cualquier hora del día, no le importaba nada. Y hacia sus
porquerías, a cual hora del día, parecían prostitutas, me daba asco. El animal
ese, después de tener sus porquerías venía a mi cama y se echaba conmigo,
pretendiendo tener algo, y cuando no le daba lo que quería me pegaba o me
obligaba, prácticamente me sentía violada, no poder negarte a algo que no
quieres hacer, no tienes idea de lo asqueroso y horrible que puede ser eso. Así
estuvimos hasta que Cristina cumplió 11 años, imagínate 10 años viviendo en ese
prostíbulo, donde las hermanas eran sus putas y él era el cabecilla o como se
llame; final mente, cuando cristina cumplió 11 años, el papa se escondía, no
mostraba mucho la cara, pero poco a poco me fui dando cuenta de que el infeliz
estaba detrás de cristina, ponía una cara de pervertido cuando estaba con ella.
Yo trataba de que cristina pase el menos tiempo posible con el desgraciado ese,
pero a veces ella quería estar con él, preguntaba por él, quería pasar tiempo
con su papa. Hace 4 años, antes de venirme a lima, fui a recoger a cristina a
su colegio a la hora de salida, pero me dijeron que ella no estaba, que su papa
la había ido a buscar temprano porque tenían que viajar algo así. Fui corriendo
a la casa, preocupada por lo que el animal podía hacerle a mi hija, y en lo que
llego a la casa, la bestia la estaba tratando de violar y mi hijita llorando.
Ese fue mi límite, me pelee con él, agarré lo que pude y me fui con mi hija de
la casa, a la casa de mis papás y apenas pude me vine a lima. Aquí fue que puse
la denuncia y hasta ahora no he tenido problemas, vivimos tranquilas las 2 en
un departamentito chiquito y mi mama me ayuda, me manda lo que puede una vez al
mes.
¿Por qué no considero
en denunciarlo, acusarlo, buscar ayuda antes?
-Como te dije al
principio, las cosas son diferentes allá, él me tenía amenazada… a veces las
mujeres tenemos que callarnos y cumplir con el esposo, no podemos quejarnos ni
nada para proteger a nuestros hijos y ver de poder darles lo que necesiten. La
vida es muy injusta en verdad.
Bueno señora,
muchísimas gracias por su ayuda con nuestro trabajo, le agradezco de todo
corazón y considero que usted es muy valiente para poder realizar lo que hizo,
mujeres así deberían de haber por todos lados.
Entrevista 3:
Nombre (Supuesto): María
Edad: 28
Muchas gracias por su
tiempo y compartir esta lamentable experiencia con nosotros.
No se preocupe, que
ya hace mucho lo supere y es bueno exteriorizarlo para las mujeres también
sepan lo que puede pasar cuando uno se enamora del hombre inadecuado, y para
que les sirva en para no cegarse ante una ilusión.
Cuénteme como empezó
la violencia con su pareja
Bueno, empezó a los 2
años de haberlo conocido. Al principio mi relación con él era buena, no
perfecta pero si me gustaba estar con él. Empecé a notar una diferencia en su
comportamiento cuando íbamos a reuniones y
se volvía bien agresivo cuando tomaba bastante alcohol, y ahí descubrí
que no era el mismo cuando salía a tomar.
Aunque en ese tiempo
solo era agresivo en sus expresiones y no físicamente, lo pase por alto,
lamentablemente una cosa llevó a la otra y sin darme cuenta yo ya tenía una
marca de cachetada en mi cara.
Yo no hice nada al porque
le tuve miedo, a que me haga algo más si le decía algo feo, solo culpé a que mi
pareja estaba borracha y no sabía lo que hacía. Lo excusaba y esperaba a que a la mañana siguiente me pida
perdón y me prometiera nunca más volverlo a hacer… pero eso no pasó. El se
levantó tarde y nunca me encaró, la verdad que no sabía cómo iba a reaccionar y
yo tenía mucho miedo, así que yo tampoco saque el tema.
Sin darme cuenta, el
empezó a insultarme cada vez más, ya no me respetaba ni me apreciaba. Ya no era
lo mismo, pero me daba miedo dejarlo. El me mantenía y me cuidaba, no sabía qué
hacer.
Un día le dije que
deje de chupar pero no me hizo caso, es más, fue peor. Cada día tomaba más y la
verdad en un momento empecé a pensar que era yo la que lo desesperaba y por eso
él tomaba esas acciones. Yo sé que decirlo ahorita suena como algo loco, pero
la realidad es que en el momento si fue así. Ya no sabía qué hacer.
¿Cómo se
empezaron a presentar mas actos
agresivos y como estos cambiaron su vida?
Fue terrible. Mi vida
cambio totalmente, todo giraba en torno a eso. En el trabajo pensaba si es que
estaba tomando o no y de que humor lo iba a encontrar cuando llegue, o si tal
vez no llegaría y me sacara la vuelta. Pero lamentablemente me encontraba más
sometida de lo que pensaba porque creía que yo era responsable de sus actos y
que por amor no podía dejar que se hunda más en la bebida.
Incluso, en algún
momento las cosas se me salieron de la mano y yo también quise empezar a tomar.
Me estaba pegando sus hábitos hasta que finalmente reaccione con una golpiza
que me dio muy fuerte... terminé con todo esto morado (señala el extremo de su
cara).
¿Después de eso lo
dejó?
No, seguí con él un
tiempo más. Era como un vicio que no podía dejar…. Pero a partir de esa vez ya yo era consciente de lo agresivo y peligroso
que se podía poner… cuando estaba borracho simplemente no se medía.
¿Cómo terminó
saliendo de esa situación?
Yo llegaba de
trabajar y lo encontré dormido en el sillón. En ese momento le dije “ya
levántate que pareces un vago ahí echado”. Se levanto me agarro por detrás y me
dio con la botella. Cuando oyeron los gritos, mi vecina entro rapidito a la
casa y llamo a la policía. Me llevo a vivir a su casa. Y ya ahí se acabo todo.
Muchas gracias por
haber compartido esta historia conmigo, yo sé que es muy dolorosa.
Entrevista 4:
Por
temas de confidencialidad se cuidara la identidad de la entrevistada, a quien
llamaremos María Victoria. María Victoria tiene 25 años, es soltera y reside en
el distrito de Los Olivos.
E: Hola, María Victoria. ¿Cómo
estás?
MV: Bien, aunque me ha costado
mucho decir esa palabra (mira hacia abajo)
E: Antes de empezar, cuéntame
un poco acerca de ti.
MV: bueno, yo empecé mis
estudios pero solo dure dos años porque no podía costearlos, así que empecé a
trabajar en una peluquería y tuve que dejar mis estudios. Ahí es cuando un día
en un evento del dueño de la peluquería conocí a esta persona que se ofreció a
pagarme los estudios.
E: Puedes contarme un poco más
de esta persona
MV: si como no. Mira yo la
verdad me va a costar un poco hablar de eso. Pero al principio todo era
felicidad. Hay veces que la gente me decía que no puede ser que exista una
persona tan buena pues y así desinteresada. Yo estaba tan desesperada por mi
futuro que empecé a convivir con el
apenas me lo propuso y en verdad casi no nos conocíamos. Toda mi familia me
dijo que era muy rápido, mis amigos también. Y que debía pensarlo mejor con más
tranquilidad. Las cosas empezaron a ponerse raras cuando ya vivíamos porque él
me hacía ver videos porno. Hasta antes de eso, yo nunca había visto y el fue mi
primera pareja con la que tuve sexo. En ese momento me sentía muy incómoda pero
él me convencía a que lo vea.
E: ¿qué hacía para convencerte?
MV: Me decía que era algo que
quería compartir conmigo y aparte como él me pagaba los estudios yo me sentía
presionada a complacerlo en lo que me pedía, que tampoco me parecía gran cosa.
Luego, empezaba a tocarme mientras veíamos las películas y siempre quería tener
sexo conmigo, incluso a veces que yo no tenía ganas y él se ponía violento.
E: en las ocasiones que se
ponía violento, ¿qué hacía?
MV: si yo no quería tener sexo
entonces él me pegaba y me decía en pocas palabras que era mi obligación por
todo lo que él hacía por mí. Después llego a un punto que un día que él estaba
tomado y llegaba de tomar con sus amigos, llego y yo estaba durmiendo. Me
empezó a tocar y yo le dije que me deje dormir. Entonces el me dijo “levántate
perra” y me jaloneo y empujo y como yo forcejee me pego y me tiro al piso para
tener relaciones. Yo lloraba y no podía creer al extremo que había llegado esta
situación. El me decía “es tu deber complacerme, acaso crees que te mantengo
gratis”.
Cuando me dijo eso me
sentí una prostituta. Al día siguiente, yo estaba destrozada, dolida… no le
hablaba y él me pregunto qué me pasaba. Ahí yo le recrimine todo lo de la noche
anterior y uso como escusa que estaba mareado y que él en verdad me amaba.
Entonces yo le perdone.
E: ¿luego de esa vez,
continuaron los maltratos?
MV: Si, la cosa se puso peor
todavía porque todos los fines de semana se le daba por tomar y cuando tomaba y
estaba mareado se ponía muy agresivo… siempre quería tener sexo, pero bien
tosco y a mí no me gustaba. Yo siempre trataba de hacerme la dormida, pero a él
no le importaba si yo tenía ganas o no y tampoco si lloraba mientras lo
hacíamos. El seguía y solo le importaba el mismo… todavía me cuesta entender en
qué momento todo cambio tanto y dejo de sr bueno.
E: ¿qué paso después?
MV: En verdad me quede meses
viviendo con él mientras me pegaba… me sentía amarrada a él porque en serio
creía que sin su apoyo yo no iba a poder salir adelante y que lo necesitaba.
E: ¿él te decía algo que te
hiciera creer eso?
MV: me sacaba en cara todo lo
que me daba y me decía que era una bruta y que solo servía para tener sexo. Que
cuando él me conoció era una peluquera ignorante.
E: ¿cómo rompiste finalmente
con esa situación?
MV: un día llego en la noche.
Me volvió a exigir. Ese día decidí que yo misma me estaba denigrando y que no
podía permitir que la situación siguiera así. También mi hermana siempre me
decía que por que seguía con él y me decía que lo deje y que me vaya a vivir
con ella. Esa noche otra vez discutimos porque él estaba borracho y me pego tan
fuerte que termine en el hospital de ESalud. Mi hermana fue a la casa y ella me
saco de ahí, me dijo que no iba a permitir que siga metida en esa casa. Me
quede como 5 días internada y cuando salí fui con mi hermana y su esposo a recoger mis cosas… hubo toda
una discusión porque José no quería que me vaya. Pero finalmente logré salirme
de esa casa.
E: ¿Cómo te sentiste al
respecto?
MV: A veces creo que si no me
hubiera ido de ahí él me hubiese terminado matando o algo… Doy gracias a mi hermana
que me hizo recapacitar.
E: De hecho tu historia es
bastante delicada, María Victoria. Quiero agradecerte por la confianza y
apertura, gracias!
Caso 5:
Nombre Gloria
Edad 11 años
Fecha y lugar de nacimiento San Martin, 15/05/95
Distrito procedencia Lima
Estado civil Soltera
Grado de instrucción 6to de primaria
Ocupación lavaba ropa
Fecha de ingreso 25.08.2009
Lugar de la entrevista Hogar Ermelinda Carrera
Nombre del entrevistador Mariana Saenz
MOTIVO DE INTERNAMIENTO
Víctima de abuso sexual
RELATO
La entrevistada refiere que, tras ser víctima de abuso físico y sexual,
llegó al hogar por solicitud de su tía con quién estuvo viviendo el último
tiempo antes de ser admitida. Cecilia fue abandonada por su madre a los dos
años, nunca la conoció y su abuela la llevó a vivir con ella a San Martín. En
San Martín iba al colegio, llevaba una vida tranquila y sus abuelos cuidaban de
ella. Cuando tenía 10 años, un tío abusó de ella. Por este motivo, la abuela
sentó una denuncia contra el tío y decidió mandarla a Lima a que viva con su
papá. Al llegar a lima, era víctima constante de maltrato físico y psicológico
por parte del padre, quien le pegaba con cables y mangueras, le decía que ella
no es su hija y abusó sexualmente de ella durante años. Esta situación se
mantuvo desde los 11 hasta los 14 años. Cecilia refiere que el hermano de su
papá y el cuñado de su papá también abusaron de ella cuando ella iba a lavar ropa
en la casa de cada uno. Cuando éste último abusa sexualmente de ella y le pega,
ella decidió escaparse donde su tía, quien sentó una denuncia por abuso sexual.
Su padre la buscó pero ella se mantenía escondida con su tía. Posteriormente,
decidieron esconderla en la parroquia donde participaba activamente su tía.
Cecilia refiere, que cuando ella se encontraba en la parroquia llegó otra tía,
la esposa del hermano de su papá, a buscarla y quiso llevarla de los pelos. Las
personas de la parroquia la defendieron e impidieron que se la lleve pero ya no
podía salir porque sentía que estaba en peligro constante de que pudieran
llevársela en cualquier momento o intentaran hacerle daño. Cecilia afirma que
finalmente, la tía decidió “darla” al Inabif y que vaya a un albergue donde se
encontraría más segura.
Entrevista 6:
Experto en el tema, Jesús Matinez aborda el tema de la problemática de
género en nuestra sociedad, haciendo mención tanto a la discriminación por
género como a aquella por elección sexual.
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